LA CANCIÓN DEL PARIA

"... y siempre voy vagando... y si algún día siente, mi espíritu, apagarse la fe que lo alumbró, sabré morir de angustia, más, sin doblar la frente, sabré matar mi alma... pero arrastrarla no" (O. Fernández Ríos)

lunes, 24 de octubre de 2011

LAS MÁSCARAS

Publicado en Semanario Entrega 2000

Estimado Pepe:

Mercedes, 14 de febrero 1921, fiesta veneciana en Mercedes. Según el diario El Día chaná: “Parece que al fin, los que vivimos en Mercedes, nos hemos dado cuenta de la imponderable belleza de nuestro gran río y que se inicia la era de aprovecharlo, organizando fiestas de una novedad y un encanto únicos. El corso veneciano realizado el sábado por la noche resultó tan soberbio, tan lucido, tan fuera de lo vulgar que ni los más optimistas de los que pugnaron por su realización creyeron jamás en un éxito de tal magnitud. La fiesta fue completa, pues disfrutaron de ella miles y miles de personas: los que tomaron parte en el concurso y los espectadores, desde los numerosos barcos que recorrían la zona demarcada y el inmenso, incontable público que presenció el desarrollo del programa desde el murallón de la Rambla, formando un macizo de gente desde el muelle de los 33 hasta el extremo Este de la Isla del Puerto. Desde antes de las 9, hora señalada para el embarque de los pasajeros, era difícil el acceso al muelle, dada la gran cantidad de público que se había estacionado allí, buscando una posición estratégica. Un poderoso reflector eléctrico, hábilmente manejado por don Antonio Reffino, colocado en el extremo del muelle, envolvía en sus rayos luminosos a las embarcaciones, dándoles un relieve sobre el fondo negro del río, que producía un efecto hermosísimo. Las embarcaciones eran muchísimas, de toda clase y calado. Vapores, paylebots, lanchas automóviles, chalanas, botes, de todo. Las había admirablemente adornadas imitando góndolas de Venecia unas, cisnes otras, otras iluminadas a luz eléctrica, otras con farolillos de papel en una diversidad de tamaño… a las 9.30 cuando el “Inca”, que estaba amarrado en el muelle, embarcó su pasaje (unas 350 personas) y se puso en marcha hacia el sitio determinado por la Comisión en la mitad del río, sonaron conjuntamente todas las bocinas y sirenas de las embarcaciones y el pirotécnico señor Caracciolo, desde el extremo de la isla, atronó el espacio con una formidable salva de bombas…”

Santa Ponsa, 30 de junio 2011, estimado Pepe, acabo de recrearme con unas imágenes del carnaval de Venecia y no sólo me recordó este hecho de 1921 en el río Negro sino de las máscaras, famosas ya, como La Bauta, que cubre todo el rostro, no posee boca y desborda de color dorado. Cubren la parte superior del rostro desde la frente a la nariz y mejillas, estas ocultan la identidad pero permiten a quien la usa hablar, comer o beber con facilidad. Tiende a ser la máscara más usada durante el Carnaval veneciano. Se empleaba en muchas otras ocasiones como medio para ocultar la identidad y estatus social de su propietario. Permitía actuar con más libertad en caso que él o ella deseara interactuar con miembros de distintos estratos sociales y escapar a las convenciones sociales en la vida diaria. También era utilizada con otros propósitos, algunos de ellos criminales, y otros personales, tales como encuentros románticos.

Estimado Pepe, exceptuando lo criminal, es posible que en muchos momentos de nuestra vida necesitemos de carnaval y máscaras para mostrarnos tal cual somos y pensamos.

lunes, 17 de octubre de 2011

MERCEDES CAMPEÓN DEL LITORAL

Dicho en Radio Impacto de Mercedes, CV116, junto a Jorge García Bachi, al consagrarse Mercedes campeón del Litoral de fútbol 1996/97:
¡Mercedes campeón! ¡Mercedes campeón!
Y con la bandera del flaco Macri quiero recorrer el Hum, recorrer trasmayos y espineles y con los pescadores del Palo Alto me bajo en Las Toninas para mirar El Puente y El Ayuí. En el corazón del barrio me espera Doña Pecha y el Gordo Atilio Los Colores, Unión Juvenil, La Ola. Con el perro Perfecto juego al ta te ti en el medio luto de Carlitos Salvador, bohemio como los eucaliptos del Parque, se dobló el puente, Roberto Matosas, Boniato Forlán, Bizcocho, los moños queridos de Doña Mangacha. En Walter Salvador me lleno de calidad con Oscar Chelle, Gorilón, Toco Roa, Héctor Eugui y no me olvido que lo echaron a Talón.

En Turco me voy hablando al Túnel, el Palomo me pinta la cara, Tunelina, azulgrana, barrio, Los 40, Gordo Méndez y juego a los vaqueros con Río Kid. Historia del tinto, clarete o cerveza, farol, fogón y campamento. Desde la Isla miro las viejas lavanderas y en chalana con mojarrero y aparejo me espera el caño maestro. Arinsa duerme, Castillo Mauá y en las alas de Tuya y Detomasi vuelo y saludo a los lecheros, Calera Dacá y descansen en paz que la gloria está acá. Con los locos del primer piso juego un picado en la Bombonera, Peñarol, Tigre Young, Carbonilla, los Mesa, Luque, Pérez Conti, Lalo Troche, el recuerdo, Carbonera, mirasol, grito escobas Alanís, Pichón y el Tata.

Tito, Saltimbanquis, qué Maravilla, repican los Hado, Nueva Salsa, la Pelala y los Rosso, Pimienta a caballo, Pelé, la Romana, Chupete Andino me dice Carapintadas, el año de los 42 tablados, Colegialas, Sombreros, Brujas, Negros del Peñarol, la Reina del Oeste canta, Sud América, buzón, los Flores, Tomera, Arballo y el Chino Sasén. Con Cabeza Castro estoy en el Ferro y el Pato grita campeón mundial, Chispa Flores, Maco Rosso. Paseo en la Ramón Fernández y pasan los obreros del Corralón y me llevan al Sandú, Pelo Allende, Carlitos Castro, techo nuevo, don Aníbal recuerda, los Rava, los Koster, pegale de punta Quinteros.

Como sandías en el corso y el Cholito Sainz me lleva al Mondongo y al Cerro. Enmascarados, Pamenteros, Asaltantes, Zenona, Cuarto Litro. Me cantan los Locos del Paraíso, la Gran Cachada. Suenan las lonjas en el Juventud, Curtti, Icardi, maestro Don Anito, hay que remar en el Biguá. En Covianalpa los brazos levantan viviendas, añora el decano, Antolín Pereca, Juanillo Rey que trae las camisetas, Sotelo De la Cruz, Cadera Fernández, echale Fariña. Grita la gorda Esquivel por Mario García, Lamarque, Burgos, los Rusch. Perini sigue echando cimientos y un bochazo se siente en La Herradura, Mojarrita que traés ahora un Remanso de felicidad.

Con el potro libre del escudo de Soriano los pinceles de Wilde Marotta me llevan al Cerro, Cara de Hombre me espera, Celeste, Cantinflas Pujolar, los Pedernera, República, barrio, pasión, color de cielo, el Olimpia, Don Aquino, Cuestabajo, Seis Estrellas, la cantera, los rodillas sucias de Sabito siguen corriendo en el Parque Don Bosco, Tío Cabrera, Mereque, el Carrasquito Nuevo, ya no pasan los camioneros al Ingenio, pero hay albañiles, carpinteros, quinieleros, changadores, herreros, electricistas, recolectores, mozos, parrilleros, chiviteros, peones, domadores, zafreros, policías y echen agua bomberos que estoy loco de felicidad.

Once Diablos se visten de rojo y juegan en el Amy a ser independientes. Walter Koster maestro, Vasco Barrenechea, Cándido Perdomo es amor, Clano Cabrera campeón, Ildo Maneiro, Gato Mondada, Cholo Galván. Los pibes del Hogar miran por el alambrado al Charo Palmarín. Levantan polvo los caballos en el circo y hacen academia en el Racing los Russo, Fernández, Patiño, Pérez, Arricar, el Patito, los muchachos de la barra cantan la retirada del Nery Mercedaria, bombo, platillo, redoblante, pintame la cara murguero dice un gurí, Diablos Verdes paseame por el Rosedal, hamacas, tobogán, Rambla, termo y mate, bizcochos, el dragoneo, la vuelta, los amigos, la playa, la plaza.

En Cachila me voy al Treinta y Tres, Barrio Nuevo, Corcho, Darío, Pato Fuentes, la cancha de Sandú. Cuidate que bajaron las barreras del ferrocarril, llevame por la 14 que en la Pamer festeja Fabricación, Madera, Corrugadora y el Taller. Del Papelero salen ómnibus con niños de la escuela, ponéle un ladrillo al Sunca que el Indio Cornelli mete un doble en el Esparta, Farruco escucha música clásica mientras crecen los estudiantes del Liceo, campeones del 73, Basilio, Fuego Negro y no te preocupés que no me olvidé de vos, Dios Verde de la historia. Estoy con vos mujer, que festeja el patricio Artigas con nombre del General, Vazquecito, hermanos García, Gil Rigos, los Tabárez.

Festejan en el Danubio y en lo Chiquín. 20 copas levanta Basignani por Soca y Posse inolvidable. Un Gato Negro y un Perro Blanco se entreveran en el festejo y brinda La Mechuda, Uruguay Díaz, el flaco Rodríguez y Cacho Ferrari. Celebran en el 34, en lo Denis, el Águila y el Bequeló, Ramos y Frantchez y lo Haller tienen colmado el mostrador. Juego una carambola en la Central y en el Sorocabana tomo un café. Abreo y el bar Olivera me llaman. Los gallegos y vascos están contentos en el Hogar y en la Sociedad los tanos queridos descorchan un moscatel de mi flor y al otro día amanezco en el Bristol junto al desayuno de los canillas.

Tocarán las guitarras de Joaquín y el negro Carlos cantará con Titonga. Orientales, Tigre, Mario Osores. Deleitate con Ricardo Villalba que no olvida el pago. Pochila recita un verso y a lo lejos suena un tango y está Chiquitín, Colacho Rigos y el bandoneón, Rosso, Alonso y Cabrerita. Las cuerdas de oro paraguayas de Gadea y Colmán, Tacho Sierra, Navarro, los Reina. Disfrutá bailando de la Charanga que ya vienen pedaleando Leonel, el Vasco, Boquita y el Cabeza. Atenas, Pedal y Joselín. No me olvido de vos Once Corazones, Fabio, Ojito director, Bella Italia, Solari, los Tihista. Mar de Fondo que quisiste y en el Policial el gordo Saucedo, Polo Pereira, Ramón Giménez y Reinoso.

Pido una lupa prestada por Cantinflas que pinta en un alfiler. Piteta Fedullo, Pedro Pasheff, Plaza de Deportes. Buenos Aires y Montevideo se nos llevan los jóvenes que siguen soñando con siempre volver. No corras tanto Fidel que Coyita pide pan de ayer, mientras los viejitos queridos hacen cola en el Mercado Central. Pesco comida en el Puerto, Surubí, la grúa ya no está y desde el Lazareto saluda al Rampla, Barboza, Catalá, Broggi, Castromán, mientras siguen festejando en el Yachting y en el Pacaembú. Juego un picado en Carrasquito, paseo por el Dacá y me alumbran las nuevas luces del Aparicio.

Los niños del Asilo y los viejitos del Hogar abrazan todos los barrios, hombres y mujeres de mi pueblo. Merceditas de mi vida que llorás en la alegría y te abrazás a la gloria y la felicidad. Una vez más tus hijos han cumplido y te ofrendan con amor una copa como mejor.
Mercedes Campeón del Litoral de fútbol 96-97. Este Litoral llevaba el nombre de un grande, de Obdulio Jacinto Varela. Y lo terminó ganando otro grande de mi corazón.... la Merceditas.... que es mi amor.
Federico Marotta